Esmir Ocampos, el integrante de la sucesión de tierras en San Antonio Este en representación de la familia Ulloa, señaló al ser consultado que, ante la demora del municipio en rubricar el acuerdo de división de las tierras familiares, procederá a lotear parte de la propiedad familiar y ponerla a la venta.
Ocampo señaló que nadie podrá aducir que la familia no ha tenido paciencia ya que los trámites llevan décadas y parte de los herederos han fallecido. Es por esto que quieren darle una solución definitiva al tema en la que el municipio se quedará con 900 de las 1700 hectáreas originales que ocupó legalmente su ancestro en los primeros años del siglo XX.
Por otra parte, el mismo se desempeña como titular de la cooperativa que explota el matadero municipal de nuestra ciudad y confirmó que a fines de octubre la vetusta construcción cerrará sus puertas y la localidad se quedará sin abasto cárnico propio.
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