La Doctora en Biología Marina, Malala Arias, que encabeza un equipo de investigadores que estudia las ballenas francas australes en en el golfo San Matías, confirmó la versión del su colega Raúl González, que se había «amesetado» la cantidad de ejemplares de estos cetáceos en la zona núcleo de la especie en torno a la península Valdez en la vecina Chubut.
La científica detallo aspectos de la vida de estos mamíferos marinos oceánicos, que en invierno y primavera se acercan a las aguas someras de la costa, para aparearse, parir y criar a sus vástagos, previo a la larga navegación que emprenderán hasta el próximo otoño austral.
La situación que afecta la zona núcleo según estimó la científica podría deberse a que la cantidad de ejemplares que cada año se congregan supera la superficie de confort que precisa cada ejemplar y por esa razón se están estableciendo en las aguas del golfo San Matías.
Esta situación permitiría suponer que con el correr del tiempo, y a su propio ritmo, cada vez será mayor la cantidad de los cetáceos en el mar rionegrino.